sábado, 22 de noviembre de 2008

Empezó la pelea interna por manejar los fondos. por Carlos Pagni


Néstor Kirchner se ufanó ayer de que los recursos de los trabajadores que el Congreso, a través de las manos de su esposa, acaba de poner en sus propias manos, "ahora van a ser bien administrados, no como hasta ahora, que fueron manejados por cuatro o cinco vivos, para cuatro o cinco grupos económicos".

En esa presunción encontró impulso la estatización previsional: las AFJP, en vez de constituir un mercado de capitales, habrían concentrado el crédito en beneficio de unas pocas empresas y bancos. Aquellos cuyas acciones están ahora en poder del Gobierno. Para que su sinceridad fuera completa, al ex presidente le faltó decir que, como repite a diario en Olivos, a las AFJP les faltó solidaridad con el país porque fueron mezquinas para solventar los proyectos que les ofrecía Julio De Vido.

El discurso de Kirchner revela una amnesia selectiva. Olvidó, por ejemplo, que el 55% de los activos de esas administradoras son bonos comprados al Tesoro, que hoy se cotizan a precio de default. Es decir, los "cuatro o cinco vivos" obligaron a los trabajadores a dilapidar sus ahorros socorriendo a un Gobierno que carece de política financiera. Además de "vivos", fueron silenciosos: nadie los oyó protestar cuando se defraudaba a los ahorristas con la manipulación del índice de inflación.

Hay otro detalle del que Kirchner no se acordó: en los últimos años, esos "cuatro o cinco vivos" estuvieron bajo la regulación del Estado conducido por él. Sólo falta que dentro de unos meses les enrostre la insensatez de haber prestado plata a su administración, como en 2003 recriminó a los empresarios españoles no haber abandonado la Argentina cuando todo se derrumbaba.

Más allá de estas perplejidades, el discurso de ayer sacó a la luz, sin proponérselo, el principal problema de la flamante contrarreforma previsional: la administración de los fondos incautados entraña un riesgo político enorme para el Gobierno, si insiste en los criterios ineficientes y poco transparentes que caracterizan el manejo de los subsidios, los fideicomisos de infraestructura o proyectos como el "tren bala".

Hay razones para temer esa amenaza. No se conoce, por ejemplo, quién se encargará de los nuevos fondos. Alrededor de esta incógnita se están peleando viejos amigos. El jefe de Gabinete, Sergio Massa, se alió con el superintendente de AFJP, Sergio Chodos, para proponerle ensayar maneras de canalizar el crédito. Massa imagina, según confesó a algunos colaboradores, una operación inaugural de asistencia financiera a un ramillete de empresas nacionales prestigiosas, cuyos nombres ya identificó: van desde fábricas de alfajores hasta autopartistas. Todo frente a las cámaras de TV, como corresponde a un cultor de la luz y el sonido.

Pero Amado Boudou también tironea de la chequera: transformando la Anses en banco, como ocurre en estos días. Boudou arrebató a Massa el dispositivo más importante: el picaporte de Olivos. El jefe de Gabinete, en conversaciones jocosas, habla de él como "el traidor" y lanza una carcajada. Bromea, claro. Pero Boudou fascinó a Kirchner, quien recela de la gravitación de Massa al lado de su esposa.

Aunque los fondos de libre disponibilidad no serán tantos, la pelea por su control es crucial para el balance de poder interno. Frente a la oficina de quien los administre harán su amansadora gobernadores, intendentes, empresarios? Hasta ahora, Kirchner sólo delegó el poder que conllevan tareas semejantes en De Vido. ¿Habrá un nuevo De Vido en el Gobierno? Esta pregunta no tiene respuesta, así como tampoco se sabe cuáles serán los parámetros con que los recursos serán administrados. La ley sancionada anteanoche mantiene los adoptados por los "cuatro o cinco vivos", ya que remite a las normas dictadas en los años 90. Por ejemplo, hasta el 50% de la recaudación previsional se le podrá prestar al Estado y el 30%, a provincias y municipios.

¿Serán sustituidas esas reglas? ¿Cuáles vendrán en su reemplazo? Para develar ese misterio, hay un solo indicio: en estos días, la Anses está asistiendo a empresas privadas con criterios de selección a los que es difícil tener acceso. Los dos últimos casos relevantes fueron un grupo de capitales suizos y otro dedicado a infraestructura eléctrica. Este método cuerpo a cuerpo no difiere mucho del que practica Guillermo Moreno en otras áreas del Gobierno.

Boudou ofrece financiación a una tasa de interés de alrededor del 28% (Badlar + 8 puntos). En lo que va del mes, rescató fideicomisos de consumo de electrodomésticos, salvó a algunos bancos de la corrida de depósitos y compró acciones de empresas afectadas por la caída de la Bolsa. Deberá seguir haciéndolo hasta que se reglamente el nuevo sistema. Pero le acaba de llegar una mala noticia: la recaudación previsional cayó este mes de manera inesperada.

En los bancos oficiales existe preocupación por este régimen. Allí aconsejan canalizar los préstamos a través de bancos comerciales que ofrezcan, en licitaciones transparentes, las condiciones más favorables.

Sin embargo, para quienes conocen la ansiedad del esposo de la Presidenta frente a la recesión y el desempleo sucederá otra cosa: los funcionarios terminarán amenazando a los bancos con retirarles los depósitos de la Anses si no prestan, en las condiciones que fija el Gobierno, a las empresas o provincias digitadas. Estatizar, en la Argentina, es poner activos al arbitrio de una sola voluntad: la de Kirchner.

Pero la administración de los fondos previsionales, por la forma perentoria en que fueron confiscados, será puesta bajo la lupa como nunca antes. Si no advierte este fenómeno, el Gobierno se expone a encontrar su ruina allí donde cree haber hallado una solución.

Siempre excelente el artículo de C. Pagni para La Nación.__

Ahora los comentarios de los lectores:

*** El Shalaco :
1) Hablarás siempre como si estuvieras absolutamente convencido de que tienes la razón, y de que sólo la tienen quienes adhieren a las ideas de tu partido. 2) Señalarás a tus adversarios como culpables de todo lo malo, incluso del daño que tú has hecho. Te valdrás de cuantas falacias sean necesarias para lograrlo, y jamás admitirás tus errores. 3) Prometerás en cada elección que, esta vez, verdaderamente, llegará el "cambio". Seguirás haciéndolo aunque ya hayas ganado muchas elecciones. 4) Evitarás cualquier promesa concreta. Harás tus promesas manteniendo un nivel de vaguedad tal que luego no exista forma de comprobar si tales anuncios han sido cumplidos. Así, por ejemplo, en lugar de prometer un "aumento de 200 pesos para los jubilados", expresarás tu "irrenunciable y continuo compromiso para trabajar en pos de la mejora del poder adquisitivo de nuestros abuelos". 5) Si estás en el Gobierno, minimizarás, atenuarás o ni siquiera reconocerás los problemas y las crisis, y los atribuirás a causas externas y fortuitas. Si te toca ser oposición, maximizarás, exagerarás o inventarás esos mismos problemas y crisis, y asegurarás que son el lógico resultado de las erradas e ineficientes políticas gubernamentales. 6) Si los sondeos son favorables, los usarás como prueba irrefutable de tu apoyo popular y como firme fundamento para tu optimismo. En cambio, si los números no acompañan, pondrás en duda el prestigio del encuestador, cuestionarás su metodología y recordarás la gran cantidad de casos en los que los resultados de la elección fueron opuestos a los pronósticos. 7) Dirás siempre a tus oyentes lo que quieren escuchar. 8) Descalificarás a tus adversarios por cambiar de opinión o de aliados políticos con la misma fuerza que justificarás tus propios cambios de opinión y de aliados políticos. 9) Si vas ganando, no darás a tu adversario la posibilidad de debatir, alegando que ya todo ha sido dicho y que no le ves ningún sentido a prestarte a las maniobras sucias planeadas por su equipo de asesores. Si vas perdiendo y tu adversario se niega a debatir, lo acusarás de cobarde y antidemocrático. 10) Procurarás que tus gobernados no puedan desempeñar ninguna actividad económica sin violar algún artículo de alguna ley. Luego, cuando hayas sumergido a todos en la ilegalidad, aplicarás el famoso principio: "Para mis amigos todo; para mis enemigos, la ley", y ganarás el apoyo tanto de quienes te aman (que quieren todo) como de quienes no (te odian, pero actúan como si te amaran porque le temen a la ley que tú aplicas). ___

*** Frank Urk :
¨Detrás del ruido del oro, van los maulas como hacienda¨ (Atahualpa Yupanqui), no se equivocó..........

*** el olvidau :
Todo pueblo tiene el gobierno que se merece, si ellos gobiernan a gusto y placer es porque tienen una masa anestesiada por los medios que contribuyen a esta operatoria...Alguien reclamó a conciencia los fondos de Santa Cruz en el exterior ?,La valijas del bolivariano emperador que contribuyeron a no se que actos de los meses que pasaron ? El negocio del narcotráfico y las consecuencias del mismo ?, los negociados con la salud pública ? Las obras en todo el país que se facturan a precios inmorales ? El delito en los grandes centros urbanos ? La inseguridad de vivir encerrados entre rejas en nuestras propias casas ? NADIE DICE NADA ? Tenemos el gobierno que nos merecemos...QUIEN ES EL PRINCIPAL RESPONSABLE ?...CUANDO VOTEN, Haganlo a conciencia...Merecemos un mejor destino...En las próximas elecciones legislativas es un comienzo del cambio, para eso hay que comprometerse y no eludir ser fiscales y presidentes de mesa, de esa manera se lucha contra el fraude...Se pude cambiar este destino.

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